Ubicada a unos 250 kilómetros de la ciudad de Taif, en el extremo occidental de la meseta de Harrat Kishb en la provincia de La Meca, la maravilla natural de Al-Wabhah es única en su tipo con su estructura hueca y su lago opaco en el centro. Tiene 250 metros de profundidad y 2 kilómetros de diámetro y es más conocido como Maqlaʿ Ṭamiyyah.
Turismo
La caminata hasta el fondo del cráter Al-Wabhah solía ser extremadamente desafiante y la subida de regreso fue dos veces más desafiante debido a lo empinado y resbaladizo que era el cráter. En el transcurso de los últimos años, se ha modificado para convertirlo en un lugar amigable para los turistas mediante la construcción de un muro de piedra, un sendero, una mezquita al final de la carretera de entrada y refugios para pícnic alrededor del borde.
Caminando hasta el fondo
Hermoso como es en la superficie, la verdadera maravilla está en el fondo del cráter. Al ingresar al cráter desde el sendero norte, verá cristales blancos de fosfato de sodio que forman una hermosa corteza brillante en el centro. La caminata hasta el fondo puede demorar entre 45 y 50 minutos, pero cada segundo vale la pena a medida que se adentra cada vez más en el corazón de esta asombrosa maravilla natural.
Siempre que llueve, la zona se transforma en un lago nacarado que, junto con la vegetación verde en el borde del centro, lo convierte en una vista magnífica. Si bien el desierto alrededor del cráter es estéril, el cráter en sí alberga hermosas palmeras y arbustos. Un campo de lava seca también es visible en el borde norte del hueco.
